Allí están, todas las gentes ante un silencioso enigma.
Bajo la lluvia,
respirando,
recibiendo el poder de la magia de este punto del universo,
donde somos concientes
que justo aquí,
parte de la historia desvió su rumbo varias veces.
Son esos misterios que a veces sentimos lejanos.
Esos misterios, que sucedieron praciticamente en nuestra era,
en nuestro momento evolutivo.
Y allí estamos los que no comprendemos.
Los que no asimilamos, los que no aceptamos.
No son ruinas las que quedan...
son momentos moldeados por manos decididas,
por manos vencidas,
por tus manos,
por mis manos, por nuestras manos...
Y así están esas mentes abiertas,
de quienes allí estuvieron
de quienes allí nacieron
de quienes allí murieron
de quienes allí vencieron
llorosos, culposos, avergonzados.
Como todos nosotros,
los que hoy miramos.
Miramos y callamos, acongojados
un pasado persistente...
un pasado de piedra, de sangre, de gritos ahogados de dolor.